Aunque el desayuno es quien se lleva la atención de todos los focos, la merienda desempeña también un papel importante en la alimentación de los niños y adolescentes, ya que les proporcionan la energía y los nutrientes necesarios para mantenerse activos y concentrados durante el día. Además, las meriendas adecuadas pueden ayudar a controlar el hambre entre comidas principales y prevenir el consumo excesivo de alimentos poco saludables. En este artículo, exploraremos la importancia de las meriendas saludables y ofreceremos pautas prácticas para elegir opciones nutritivas y equilibradas.
1. Beneficios de las meriendas saludables.
Las meriendas saludables ofrecen una gran variedad de beneficios para los niños y adolescentes:
a) Energía sostenida: Las meriendas proporcionan un impulso de energía entre las comidas principales, lo que ayuda a mantener un nivel constante de energía durante todo el día. Esto es especialmente importante para los niños y adolescentes que tienen altas demandas energéticas debido a su crecimiento y actividades físicas.
b) Nutrientes esenciales: Las meriendas bien planificadas pueden ser una oportunidad para incluir nutrientes adicionales en la dieta de los niños y adolescentes. Por ejemplo, una merienda que incluya frutas o verduras proporcionará vitaminas, minerales y fibra adicionales.
c) Control del hambre: Una merienda saludable puede ayudar a controlar el hambre y prevenir la sobre ingesta de alimentos poco saludables en las comidas principales. Al mantener el hambre bajo control, se fomenta una alimentación equilibrada y se evitan los antojos de alimentos poco saludables.
2. Características de las meriendas saludables.
Las meriendas saludables deben cumplir con ciertas características para proporcionar los nutrientes necesarios y mantener un equilibrio en la alimentación:
a) Incluir una combinación de grupos de alimentos: Una merienda equilibrada debe combinar diferentes grupos de alimentos para garantizar una variedad de nutrientes. Se pueden incluir alimentos como frutas, verduras, proteínas magras, granos enteros y lácteos.
b) Proporcionar una fuente de proteínas: La proteína es esencial para el crecimiento y desarrollo muscular, y también ayuda a mantener la saciedad. Se pueden incluir opciones como yogur griego, nueces, semillas, o lonchas de pavo o pollo.
c) Incluir carbohidratos saludables: Los carbohidratos son la principal fuente de energía para el cuerpo. Se pueden optar por carbohidratos saludables como frutas, verduras, granos enteros y productos lácteos.
d) Limitar el contenido de azúcares añadidos y grasas saturadas: Es importante evitar meriendas que contengan altos niveles de azúcares añadidos y grasas saturadas. Se deben preferir opciones naturales y evitar productos procesados que contengan azúcares y grasas poco saludables.
e) Ser prácticas y fáciles de preparar: Las meriendas saludables deben ser prácticas y fáciles de preparar, especialmente para los niños y adolescentes que pueden querer tomar una merienda rápida entre sus actividades. Se pueden preparar meriendas previamente, como porciones de frutas o vegetales cortados, yogures individuales, bocadillos o recipientes con nueces ya peladas.
3. Involucrar a los niños en la preparación de las meriendas.
Una forma efectiva de promover hábitos alimentarios saludables en los niños y adolescentes es involucrarlos en la preparación de las meriendas. Esto les brinda la oportunidad de aprender sobre los alimentos, desarrollar habilidades culinarias básicas y sentirse más motivados para probar y disfrutar de opciones saludables. Los padres pueden asignar tareas adecuadas a la edad, como lavar frutas y verduras, mezclar ingredientes, preparar platos sencillos o empaquetar las meriendas en porciones individuales. Al hacerlo, se les está enseñando la importancia de una alimentación equilibrada y brindándoles una sensación de autonomía y orgullo por su participación en la preparación de sus propias meriendas.
Conclusión.
En resumen, las meriendas saludables son una parte importante de la alimentación de los niños y adolescentes, proporcionando energía, nutrientes y ayudando a controlar el hambre entre comidas. Al seleccionar meriendas que sean equilibradas, incluyendo una combinación de grupos de alimentos, evitando azúcares añadidos y grasas saturadas, y siendo prácticas y fáciles de preparar, se puede promover una alimentación saludable. Además, involucrar a los niños en la preparación de las meriendas les brinda la oportunidad de aprender y desarrollar habilidades culinarias básicas. Al proporcionar opciones de meriendas saludables y fomentar una relación positiva con la comida, estamos sentando las bases para un estilo de vida saludable y una alimentación equilibrada a lo largo de su crecimiento y desarrollo.
